El nuevo Mazda CX-80 recibe una calificación de 5 estrellas Euro NCAP
- Puntuación sobresaliente en las categorías de protección de ocupantes adultos e infantiles. Muy buenos resultados en la categoría de usuarios vulnerables de las vías públicas. Un nuevo buque insignia de Mazda, Crafted in Japan, con grandes dosis de confort, comodidad y versatilidad.
- El nuevo Mazda CX-80 ha obtenido la máxima valoración de cinco estrellas en la última serie de pruebas Euro NCAP. Este SUV de hasta siete plazas, el nuevo buque insignia de la marca, alcanzó una puntuación del 92% en la categoría de protección de ocupantes de adultos y un 88% en la de protección de ocupantes infantiles. Asimismo, recibió una meritoria calificación del 84% en lo referente a protección de usuarios vulnerables de las vías públicas.
La extraordinaria puntuación del 92% en la categoría de ocupantes adultos se apoya en unos resultados de impactos laterales y traseros con la nota máxima, a los que se suma un nivel de protección más que satisfactorio en la prueba de impacto frontal contra una barrera fija. En las pruebas de impacto lateral contra una barrera y un poste esta última más exigente, la protección del vehículo resultó correcta en todas las zonas críticas del cuerpo humano, lo que dio como resultado la máxima puntuación posible.
En la categoría de ocupantes infantiles, el Mazda CX-80 también obtuvo la máxima puntuación en las pruebas de impacto frontal e impactos laterales, aplicables a niños de 6 y 10 años. Dentro de este bloque, la comprobación del sistema SRI, que verifica la correcta instalación de las sillas infantiles, recibió también la máxima calificación, lo que contribuyó a una excelente puntuación combinada del 88% en este capítulo.
En la categoría de protección de usuarios vulnerables de las vías públicas, el nuevo Mazda CX-80 alcanzó un impresionante resultado del 84%. Ante la posibilidad de atropellar a un peatón, la respuesta del sistema de freno de emergencia autónomo (AEB), tanto marcha adelante como marcha atrás, se consideró muy correcta. También lo fue en las pruebas de reacción ante ciclistas, incluida la protección contra el “dooring”, esas maniobras en las que alguien abre bruscamente una puerta al paso de un ciclista que se aproxima por detrás